El tomillo, regalo de la naturaleza que todos los aficionados a la cocina conocen, también ayuda a cuidar nuestra salud con sus propiedades medicinales.

El tomillo, Thymus vulgaris L. en latín, es una planta que ya era usada en el antiguo Egipto en el proceso de embalsamamiento de los Faraones y en Grecia era muy utilizado por su aroma siendo usado a modo de incienso en los templos. Se cree que su amplia difusión por Europa fue debida a los romanos.

La planta del tomillo, de la familia de las labiadas, alcanza una altura de unos 30 cm y crece en lugares expuestos al sol y en tierras arcillosas de Asia, Europa meridional y América del Norte.

Son muchas las variedades de tomillo que existen, todas ellas con un aroma fuerte y agradable, aunque para uso medicinal las más usadas son el Thymus vulgaris y el Tomillo salsero o blanco.

Las hojas y las flores son las partes usadas con fines medicinales y para su uso culinario son las hojas la parte que se utiliza tanto frescas como secas.

Sus componentes son los que hacen del tomillo este regalo que podemos usar para cuidar nuestra salud.

El aceite esencial de tomillo es rico en: carvacrol, borneol, cíneol y el más importante para la salud timol.

También contiene flavonoides, lo que hace del tomillo un buen antioxidante, aminoácidos y es rico en calcio y hi

Son muchas las propiedades medicinales que tiene el tomillo, y puede ser usado de forma interna y también de forma externa.

  • Solucionar problemas de las vías respiratorias: tos, bronquitis, congestión, etc.
  • Su riqueza en hierro lo hace aconsejable en casos de anemia y también para tratar la anorexia pues estimula el apetito.
  • Combatir los parásitos intestinales.
  • Levantar el ánimo, mejorar la memoria y tener buenas digestiones.
  • Sentir mejoría en caso de padecer alguna enfermedad de tipo reumático.
  • Alivia los dolores asociados a la menstruación.
  • Calmar los dolores de cabeza, mejorar la circulación y combatir la diarrea.

De forma externa es aconsejable para:

  • Combatir el mal aliento, calmar los dolores de garganta y tratar problemas relacionados con la boca: infecciones, flemones, etc.
  • También nos puede ayudar a combatir las infecciones oculares.
  • Las heridas cicatrizarán antes si las lavamos con una infusión de tomillo.
  • Conseguir que pies y manos no suden en exceso.

Usado en dosis normales no presenta ningún problema. En cambio hay que tener muchísima precaución con el aceite esencial de tomillo ya que es muy fuerte.

Es mejor no utilizarlo nunca (a nivel externo o interno) sino es bajo el asesoramiento de un aromaterapeuta o especialista ya que puede ser muy irritante. Tampoco debe ser usado en casos de embarazo, úlceras o problemas de corazón.

Compartido por Leticia Lucero